Un cubano denunció este miércoles los problemas de convivencia que está padeciendo en una ciudadela en Arroyo Naranjo, La Habana.

«A quien pueda interesar. Yo: Ramón González Moya, vecino de Alberto González #19 int entre Finlay y Cisneros Betancourt, # de CI- 55030812466, decido exponer mi caso por esta vía ya que las organizaciones pertinentes no cumplen con lo establecido según la Constitución de este país», dijo el afectado en Facebook.

«La situación es la siguiente: vivo en una ciudadela que consta de ocho cuartos, siendo todos estos usufructo gratuitos. En reiteradas ocasiones he presentado problemas con la vecina Mercedes Hernández y su hijo Noel López, el cual actualmente salió del país. Dichas situaciones fueron informadas a Planificación Física y Vivienda pues todo esto se salió de control hace mucho tiempo. Hemos llegado hasta los golpes, ha intervenido la Policía y yo he terminado en el hospital con daños físicos. Así mismo, me presenté en las entidades antes expuestas pidiendo atendieran y solucionaran mi caso».

«El 16 de julio del 2019 la vecina Mercedes y Noel su hijo hicieron uso de las tendederas colectivas y de dos baños colectivos usando los mismos como ampliación de su vivienda. Cabe redundar que la entrada de la ciudadela es un pasillo estrecho y al agrandar su cuarto prácticamente dejan muy poco espacio para tender».

«Luego de esto abren una puerta frente por frente a la mía. Cerraron la puerta que los comunicaba por dentro y alquilaron la parte que se cogieron. Esto fue en plena pandemia. Me dirigí a Vivienda, pedí una cita con la directora explicando mi situación pues no tengo privacidad. Todo aquel que los visita, los tengo parados en mi puerta».

«Después de haber hablado con la misma, me manda para Planificación Física, donde la directora me dice que todo lo antes expuesto era legal y que no tenía derecho a reclamar. Al ver que no fui escuchado, me dirijo a Planificación Física de la Provincia, donde realmente no me quisieron atender pues eso tenía que ver con Planificación Física municipal».

«En fin, todo un peloteo. Luego de todo lo antes expuesto, la misma vecina pone un aire acondicionado frente a mi ventana y la otra del lado pone otro aire también pegado a la ventana, dicha ciudadela no consta con relojes 220 V, es decir, que el consumo de los mismos es fantasma».

«El ruido y el calor es inaguantable. Todo ese vapor se cuela para mí cuarto. Tuve que tapar mi ventana quedándome sin ventilación. Volví a los mismos lugares y su respuesta fue que ellos podían hacer lo que ellos quisieran: poner el aire en cualquier lugar».

«Voy nuevamente a Planificación Física provincial y estos ordenan a la municipal que mandarán inspectores, al comienzo fueron dos inspectores y dijeron que allí todo estaba ilegal. Cuando fui a recoger los resultados, la directora se había negado a firmar los papeles y provincia la hizo firmar los papeles».

«Luego de esto me dirijo al registro de la Palma y contrato un abogado, este me pidió la propiedad de la casa, dándole yo la original pues el mismo me dijo que el trámite no pasaba de una semana. Me pidió 1000 pesos para el Estado y 3550 pesos para el moverse. Esto fue el 11 de julio del 2022, cayó un miércoles a la 11 de la mañana».

«Hicimos el contrato, acto seguido el abogado Manuel Guzmán Montejo llamó vía telefónica usando alta voz a la Dirección Municipal de Planificación Física, diciendo ella que dejara todo ahí, que ese caso era de ella que después ellos conversaban de este último trámite. Hace más de un año y el juicio nunca llegó. Fe hecho, el abogado nunca más me ha dado la cara».

«Ahora pregunto: ¿dónde quedan los derechos de los ciudadanos? He ido por todas las vías correspondientes y nada. Me siento ofendido, burlado y estafado. Para mal de males, Mercedes está por salir del país, quiere decir que continuarán mis problemas con los que compren su casa», concluyó la denuncia del cubano desde La Habana.